Escribo desde que me acuerdo. Antes en polaco, cuentos para mi hermana y mis primas, luego poesía. Escribo porque si no, me ahogo. Porque hay tanta belleza en este mundo que a veces duele y, si no lo lanzo, se me come. Escribo por todo el amor dentro y fuera de mí. Y porque agradezco a la vida. Por, de alguna manera, aportar un poco.
martes, 12 de noviembre de 2013
Dentro grita-
El silencio por fuera se intenta
Puedo peinar mi pelo cien veces
Encontrar el botón diminuto de tu deseo
Escribir apenas ocho letras
Repetirlas sin parar
Comer todo el papel mojado
Dar mis opiniones cual manzanas
Pasear en los charcos de tus susurros
Alargar mis pestañas
Olvidar todo aquello que no fue
Y pudo ser si no fuera porque no pasó
Toser este cariño en en pañuelo de tu mano
Se intenta el silencio por fuera
Se trata que acaricie con el filo de su diente
Lo menos posible
Y que sea corto
Que el dolor se quede en cinco letras
Con su colita fina de mamífero hambriento
Entre mis costillas
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Ese punto de inquietud de tus poemas.
ResponderEliminarProbablemente seas tú en tu más verdad, M.
La imposibilidad aparente (aunque en poesía nada es imposible) de algunas de tus imágenes: charcos y susurros.
la incógnita de esas ocho letras.
Que dolor sólo sean apenas cinco.
Todo un cóctel de sentimientos/sentidos expuestos aquí.
Se agradece tu vuelta, M.
Un beso.