miércoles, 26 de marzo de 2014

Mis gatos juegan
Enredan sus colas infinitas
Colgando de la terraza sus corazones
Al sol
Me estiro las penas
Maúllo con descuido
Araño el eco de tu voz
Espanté los ratones del olvido

Ahora la dulce mano de la vida
Me rasca el lomo suavemente
Contra el pelo


Soy esa vena de la hoja que cae
Esa caída del tiempo que olvida
El olvido que llena el cerebro
Del árbol

Ya está, ya llega, 
Mueve mis hojas interiores
Con el dedo de su momento.
Viene con agua, casi cristal
Acuna el ámbar de mi corazón.
Me trae paz,
Me trae verde,
Me trae letra.
Ya vuelve, casi avergonzada,
Pálida aún pero preparada.
Todo mi cuerpo responde,
Toda mi respuesta grita,
Todo mi grito es aire
Que ahora llena el pulmón del sueño.