Escribo desde que me acuerdo. Antes en polaco, cuentos para mi hermana y mis primas, luego poesía. Escribo porque si no, me ahogo. Porque hay tanta belleza en este mundo que a veces duele y, si no lo lanzo, se me come. Escribo por todo el amor dentro y fuera de mí. Y porque agradezco a la vida. Por, de alguna manera, aportar un poco.
domingo, 19 de febrero de 2012
En este molinillo que es el mundo
Tan sólo necesito un granillo de (ca)fe
Café y fé, buen tándem para mantenerse despierto.
ResponderEliminarAñoro aquellos molinillos que recorrian cada grano hasta hacerlos trizas.